Economic Sanctions as Collective Punishment: The Case of Venezuela By Mark Weisbrot and Jeffrey Sachs* April 2019

Para publicación inmediata : 25 de abril de 2019

Washington, DC - Un nuevo artículo del Centro para la Investigación Económica y Política (CEPR), por los economistas Mark Weisbrot y Jeffrey Sachs , encuentra que las sanciones económicas implementadas por la administración Trump desde agosto de 2017 han causado decenas de miles de muertes y están empeorando rápidamente La crisis humanitaria.

"Las sanciones están privando a los venezolanos de medicamentos que salvan vidas, equipos médicos, alimentos y otras importaciones esenciales", dijo Mark Weisbrot, codirector de CEPR y coautor del informe. “Esto es ilegal según el derecho estadounidense e internacional, y los tratados que los Estados Unidos han firmado. El Congreso debería moverse para detenerlo ".

El documento señala que el reconocimiento por parte de la administración Trump de un gobierno paralelo en enero creó un nuevo conjunto de sanciones financieras y comerciales que son devastadoras para la economía y la población. Estas nuevas restricciones hacen que sea mucho más difícil incluso pagar por los medicamentos y otras importaciones esenciales con las limitadas divisas disponibles.

Los autores también explican cómo las sanciones impiden una recuperación económica de la grave depresión económica e hiperinflación del país.

"La crisis económica de Venezuela se culpa habitualmente a Venezuela", dijo Jeffrey Sachs, coautor del periódico. "Pero es mucho más que eso. Las sanciones estadounidenses apuntan deliberadamente a destruir la economía de Venezuela y, por lo tanto, conducir al cambio de régimen. Es una política infructuosa, despiadada, ilegal y fallida, que causa graves daños al pueblo venezolano ”.

Entre los resultados de las amplias sanciones económicas implementadas por la administración de Trump desde agosto de 2017:

Se estima que más de 40,000 muertes de 2017 a 2018;
Las sanciones han reducido la disponibilidad de alimentos y medicamentos, y han aumentado las enfermedades y la mortalidad;
Las sanciones de agosto de 2017 contribuyeron a una fuerte disminución de la producción de petróleo que causó un gran daño a la población civil;
Las sanciones aplicadas en los EE. UU. Desde enero, si continúan, resultarán casi seguramente en decenas de miles de muertes más evitables;
Esto se basa en aproximadamente 80,000 personas con VIH que no han recibido tratamiento antirretroviral desde 2017, 16,000 personas que necesitan diálisis, 16,000 personas con cáncer y 4 millones con diabetes e hipertensión (muchas de las cuales no pueden obtener insulina o medicina cardiovascular);
Desde las sanciones que comenzaron en enero de 2019, la producción de petróleo ha caído en 431,000 barriles por día o 36.4 por ciento. Esto acelerará en gran medida la crisis humanitaria, pero la disminución proyectada del 67 por ciento en la producción de petróleo para el año, si las sanciones continúan, causaría una pérdida mucho mayor de vidas humanas.